A la Plaza de Toros México, ahora sí se la llevó
“Patas d´hilo”.
Qué pena por los verdaderos aficionados, por los que de
verdad se la juegan, por la gente honesta que vive de la Fiesta, por los
ganaderos escrupulosos, por los pocos románticos que quedan, por los niños que
juegan al toro, soñando ser toreros.
La Fiesta en México está en manos de empresarios, toreros y jueces
sin ética, y villamelones. ¡Si! Porque ahora son a ellos, a los villamelones a
los que los jueces procuran darle gusto. Un verdadero juez debería tener un
criterio firme, porque no se puede regir una plaza, por gente que no sabe.
Entusiasta, sí, pero sin los conocimientos suficientes para pedir orejas y
mucho menos para pedir un indulto.
A veces me pasa por la mente la idea de que quizá los jueces
tengan la orden (cosa que no debería ser porque por encima de la empresa, está
la autoridad designada por la Delegación) de dar orejas, para que a la hora de
entregar cuentas a sepa Dios quién, la temporada luzca numéricamente exitosísima;
como que el desempeño de toditos, empezando por el gran orquestador, o sease,
el empresario, fue tan atinado e impecable, que hubo en la temporada 567 orejas
cortadas, 45 rabos, 25 indultos y 347 salidas en hombros… Y si las cifras van a
la baja ¡regalen toros! para emparejar la cosa. No se… es que no entiendo qué
otra cosa puede estar pasando.
Lo sucedido en la 8ª corrida ya se pasó de cualquier nivel
de abuso y de absurdo. Empezando por la oreja de Pizarro, quien atinadamente
expresó en algunos comunicados que él estaba consciente de no merecerla, por lo
que la entregó a su cuadrilla.
Pero el colmo de colmos fue el indulto al toro de regalo del
Fandi. Empezando por la forma tan ordinaria y corriente con la que toreó a este
toro tan noble, de tanta calidad; toros que merecen un torero que en conjunto,
hagan una sinfonía, una obra maestra, un mensaje que quede para generaciones
futuras.
Hagan de cuenta que al Fandi le dieron una botella del más
fino y caro champagne y lo mezcló con Pascual de guayaba, y además, se puso a
hacer buches.
Y lo peor de todo, la burla y desfachatez del torero. Díganme
si él, con todo lo que sabe de toros, con toda su experiencia, con todo lo que
ha visto, no sabía o no se dio nunca cuenta, que el toro NO era de indulto.
¿Por qué buscaba al juez en su palco esperanzado en el indulto? ¿por qué no se
tiró a matar honestamente, como correspondía, consciente de que las cualidades
del toro, aunque eran muchas, no eran para tanto? ¿por qué se aprovechó de la
presencia de tanto villamelón que pedía el perdón a la vida del toro? Se me
hizo una actitud advenediza y trepadora. El Fandi dijo: “De aquí soy”…. Y
aprovechando la manga ancha del juez, vio su oportunidad… si, OPORTUNISTA, es
el término.
3 comentarios:
Todo está dicho.
Para resúmenes y crónica certeras de las corridas en La México, mejor visitar a los que si saben de toros en www.desolysombra.com
Estimado Igsosar. Un abrazo en estas Navidades y gracias por tu comentario.
Estimado Anónimo.
Gracias por la recomendación. Es un portal que me gusta mucho y leo con frecuencia. Espero aprender algo de ellos para algún día pertenecer al grupo de los que si saben. Un fuerte abrazo y gracias por tomarse el tiempo de comentar.
Publicar un comentario