domingo, 26 de septiembre de 2010

Mi gusto es…


Cuando tomé la decisión de hacer la versión impresa de los apuntes realizados para el blog “Obispo y Azabache” jamás imaginé las enormes satisfacciones que me daría.

Personas muy queridas me convencieron argumentando que no todos los taurinos se metían a ver blogs y que además, valía la pena tenerlo impreso.

A fin de cuentas, y a manera de un mero capricho personal, “pos que lo imprimo”, en un tiraje, que por su cantidad, llamaría yo, íntimo.

El primer y gran honor fue el prólogo.

Durante muchos años he admirado sinceramente a un personaje que para mi es el máximo exponente actual de la crítica taurina en México. Un hombre siempre fiel a sus argumentos y siempre congruente con ellos.

No me alcanzan las palabras, además de que se quedan muy cortitas ante las de él, para agradecerle al Señor Leonardo Páez (¿La Fiesta en Paz?, Periódico La Jornada) el texto que da inicio a esta publicación. El prólogo en sí valió la edición.

También agradezco a todos los taurinos que lo han recibido con gusto, algunos me han dedicado palabras realmente lindas, las cuales me motivan para seguir haciendo estas entradas.

Esta edición me ha dado también la oportunidad de conocer gente nueva, en mi afán por hacerlo llegar a más lectores. He conocido personas afines a mi en el gusto por la tauromaquia, totalmente escasas en el lugar donde vivo, en el que pensé que yo era la única.

Un agradecimiento muy especial al Señor Oscar Cadena por la invitación que me hizo a su programa de televisión EnCadenaTV para presentar mi publicación. Fue una gran sorpresa y un gran honor para mi estar ahí, platicando de este tema al cual amo profundamente.

En fin, que lo que pensaba yo que era un simple gustito para compartir con los amigos, se ha convertido en un gustote para compartir con los amigos de siempre, los nuevos amigos y los que surgirán.

Pero a las dos personas a las que más les agradezco el apoyo en todo y el apoyo de siempre son a mis amados Carmen y Curro, mis incondicionales cómplices en cada una de las aventuras en las que me embarco.

Sin ellos, sería imposible que en este momento, estuviéramos en diálogo, yo, Luna Turquesa, y tu, mi lector.

No dejen de leerme en esta próxima temporada que ya casi comienza:

Temporada Grande Plaza México 2010 – 2011, ya que ahora más que nunca estaré encantada de hacer la crónica de cada una de las corridas, mientras exista alguien del otro lado que quiera leerme.