Las huelgas de hambre han sido un recurso muy usado en el mundo
taurino. Al hambre de toros, de expresión y de libertad, se suma el hambre real,
que al final, es la que menos se siente. Como es el caso de los novilleros
colombianos, en huelga de hambre para pedir al Gobierno de Bogotá el regreso de
su Fiesta y la devolución de su plaza, donde fueron prohibidas las corridas en
junio de 2012 por su alcalde Gustavo Petro, quien pretende que la plaza
Santamaría, se utilice para actividades “de esparcimiento”. Como si hubiera
sido creada para eso, y no para ser un templo sagrado de encuentro entre hombre
y toro. Como siempre, intereses entre líneas, respaldando decisiones absurdas.
Personas como ésta ¿qué sensibilidad pueden tener? Cuando la
gente es capaz de vender lo invaluable ¿qué se puede esperar de ellos?
Toreros y aficionados de todo el mundo han manifestado su
apoyo a los novilleros, a través de redes sociales ¿pero de qué sirve? Sólo para
dar ánimo. Para saberse escuchados en su pasión y en sus sueños. En su
impotencia y en su frustración.
El Maestro César Rincón envió una extensa carta en
seguimiento al tema… pero, díganme si él, el máximo representante de la
Tauromaquia colombiana, no podría tratar de hacer algo en persona. Estando a esos
niveles de importancia, creo que se puede hacer más.
Un torero tan relevante como Rincón, puede tocar las puertas
más influyentes, y con toda la autoridad, presentarse ante este señor y decirle:
“Mire usted, señor Alcalde… yo he puesto muy en alto el nombre de mi país, me
he jugado la vida, he obtenido gloria y reconocimiento en todo el mundo. Represento
a Colombia más de lo que usted lo podrá hacer jamás… así que me escucha y le
baja a su avaricia y a su incultura, porque aquí no se trata de dinero, ni de
poder; se trata de herencias, de arte, de tradiciones, de historia, de fuentes
de empleo, de temas con verdadera trascendencia. Se trata de seguir haciendo
grande a Colombia de una manera tan sutil, que no creo que usted la entienda…”.
Pero bueno, ésto queda en mera ilusión y sugerencia.
Muy bonitas las selfies y mensajes de todos en apoyo a los
toreros colombianos, pero hay gente que podría ayudar de forma más tangible.
Los poderosos en este medio tienen que ejercer su poder, ir
a lo más alto y poner como testimonio sus hazañas. Concientizar de todo lo que
se pierde con tanta codicia e incultura; y de lo que pueden ganar, si permiten
ejercer la libertad y si defienden un patrimonio que es de todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario