Los “antis” están cada día peor. Ahora quieren que se
sancione al futbolista Sergio Ramos por festejar sus goles, simulando una
verónica con un capote. También en abril de este año, se iba a dar una conferencia
llamada “Cultura, Periodismo y Literatura en el Mundo Taurino” en la UNAM, y
gracias a unos “antis” que amenazaron a los expositores, se canceló. Pero las
manifestaciones más graves, son de los “antis” radicales, que ya están
enajenados y mal de su cabeza: amenazan con matar a la gente que se manifieste
a favor o que esté involucrada con el tema, incendian casas de periodistas, se
alegran cuando hieren a algún torero y les desean la muerte, insultan, ofenden
y agreden ¿Hasta dónde llegarán?
Ante la falta de criterio, la gente se enajena con falsos líderes,
incapaces de enfrentar problemas realmente graves, que suceden en todas partes.
La gente muere de hambre. Se matan unos a los otros. Los
niños matan niños. Un niño va al cine con el riesgo de morir por una bala
perdida. Locos se meten a escuelas y balacean a quien encuentran a su paso. Países
en guerras eternas, porque esa guerra con todas sus muertes, conviene a alguien.
Cuerpos que cuelgan de puentes. Fosas clandestinas llenas de cadáveres que
nadie reclama. Niños que se suicidan. Pornografía infantil. Adultos mayores
abandonados por sus hijos. Personas que deambulan por la calle, con la mirada y
la razón perdida. Gente enferma sin dinero para medicinas. Padres prostituyendo
a sus propios hijos por tres pesos. Sacerdotes abusando de niños. Personas encarceladas
injustamente, que tras purgar una condena ajena, salen convertidos, ahora sí,
en criminales… las noticias de diario. Ésto debería ser prioridad para
cualquier persona sensible. Lo terriblemente irónico, es cuando los
animalistas, pierden la humanidad. La gente desperdicia energía, tiempo y
dinero en causas absurdas, creando tensión donde no debería existir, mientras
el mundo se desmorona ante sus ojos. ¿Por qué tanta intolerancia para unas
cosas y tanta manga ancha para otras?
Tomando de muestra Cancún ¿saben cuántos toros se matan en
promedio al año en la plaza? seis, mismos que han vivido cuatro ó cinco años en
mejores condiciones, que muchos seres humanos. ¿Es una cifra relevante
comparada con la cantidad de animales que se comen en un solo día en un
restaurante de cortes finos en la misma ciudad? Y perdónenme, pero lo que ahí
se consume NO es por supervivencia, es por diversión.
¿Les gusta la bandera de civilizados? Muy bien. Adopten a un
niño huérfano, apoyen a una institución de caridad. Lleven medicinas a
enfermos, cuídenlos, visiten asilos. Inviten a comer a su casa a un indigente. Ayuden
en una clínica de rehabilitación para drogadictos. Denle trabajo a ex convictos.
Ocúpense en algo que realmente sea de beneficio para un mundo totalmente
carente de humanidad.
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