viernes, 11 de noviembre de 2011

¡Empezaron las rebajas de temporada!


Domingo 6 de noviembre
1ra  corrida

Enrique Ponce
Arturo Saldívar
Diego Silveti (Alternativa)
Toros de San Isidro

La temporada comenzó de forma contradictoria.
Que hubo triunfos importantes es cierto, pero también hubo cosas, que si la vemos con objetividad, dan mucha pena.
Y digo yo ¿qué pensará Ponce de los toros que le salieron por toriles? Que hasta uno lo devolvieron por falta de trapío, porque siendo la figura que es tiene que tener en su equipo, además del que le hace el pedicure, a un veedor de toros, y si es así, el matador ha de decir ¿pa’ qué te mando a ver los toros si me salen esos chivos… quemándome en una plaza tan importante como la México? Bueno, yo creo que eso dice Ponce. Porque él con su categoría, trayectoria y sabiduría, pues no pudo haber exigido esos toros, no lo creo, ha de ver sido un error, yo sé que pasa seguido, pero mejor que cambie de veedor, porque qué pena ha de sentir Ponce, porque no creo que sea exigencia de él ese tipo de corridas para venir, ¿o si?
Pero fuera del tema de los toros Ponce estuvo muy bien, como siempre, fuera de la “Poncina”que a mi no más no me gusta, claro que es muy difícil y tiene mucho mérito, pero en tanto despatarramiento pierde la estética y parece rana. En su segundo cortó una oreja, tras una faena hermosa. Y es que es un maestro frente a sus novillos, perdón, toros, me hago bolas.
Qué bueno que no le dieron la oreja en su toro de regalo, ya que no mató bien a la primera, y su faena, si bien meritoria porque el toro era muy quedado, tampoco fue cosa del otro mundo. Esta negativa del juez a concederle la oreja, fue el único rasgo de seriedad de la tarde.
Lo que estuvo bonito fue brindarle a su subalterno y la despedida del mismo, con sus Golondrinas.
Arturo Saldívar muy bien toda la tarde. Viene en esta temporada con una actitud mucho más seria y asentada. En su primer toro se la jugó, el toro embestía descompuesto, expuso mucho, demostró mucho valor y decisión. Tras un pinchazo, una estocada muy defectuosa. En su segundo estuvo muy bien, muy valiente, muy serio, con un toro muy soso y tras una excelente estocada, cortó dos orejas.
Pero el chiquito Saldívar, además de esto, regaló un toro, el mejor toro de la tarde, mismo que mereció arrastre lento. Arturo lo aprovechó cabalmente y tras una excelente faena culminada con gran estocada, el juez, de forma por demás generosa, le concedió las dos orejas y el rabo, cuando con dos orejas hubiera sido más que suficiente, pero pues así es, iniciamos abaratando la temporada. Qué bonito.
Diego Silveti en esta tarde sólo mostró detalles, habrá que verlo después. Y bueno, quería regalar un toro que a él si le hacía falta, pero pues ya no había en los corrales.
Y es que tanto regalo así no más, no me parece correcto. Habría que reglamentar los regalos para que no se vuelva una cosa sin sentido y sin control. Deberían crear un consejo de jueces que dictaminara si en ese caso aplica un regalo o no, porque lo que es aquí, cada quien hace lo que se le da su gana.
Hay que recapitular en esta primera corrida, triunfal para las estadísticas, penosa para la seriedad que debería tener la plaza México, sacando toros sin trapío, tanta generosidad con los rabos y tanto regalo que ya parecía fecha navideña. No permitamos abaratamientos y tampoco permitamos que ningún torero venga a nuestra plaza a “jugar al toro”.

1 comentario:

Xavier González Fisher dijo...

Luna: Yo creo que justo sería decir que el toro de "la colita" de Saldívar, también era "un chiqutín". Saludos desde Aguascalientes.